Existen hoteles malos… después está Baruk.
Los palmarés al “hotel” más incómodo, para descansar sin duda es este.
Te tratan de vender un “hotel” bonito, lo cual es puro espejismo.
Empezamos por el principio, llegando al lobby estaban dos personas (un hombre y una mujer) hablando entre ellos que se pusieron una súper borrachera, que rico andar así, etc, etc, todavía me preguntan a mí qué opinaba al respecto a lo que me me sorprendió que me involucraran.
Para darte la “habitación” tienes que dejar un depósito de $2,000 por cada una. Se me hace exagerado por el tipo de “hotel” que es, en otros hoteles no te piden dejar nada o es relativamente muy poco.
Por fin teniendo las llaves de las habitaciones me dirigí hacia la entrada del hotel donde estaba mi vehículo (con mi familia esperándome) y en eso un señor extraño que supongo era del valet me pidió las llaves para estacionar mi vehículo. Desafortunadamente tuve una experiencia con un valet y no me gusta que me estacionen cualquier vehículo que tenga, en especial este que es muy grande. Pues resulta que se molestó por no ir a estacionarlo, yo mismo lo hice junto con mi familia, la entrada y el estacionamiento está muy mal diseñado y es complicado el andar dentro. No cuentan con las debidas señalizaciones para saber dónde estacionarte, todos los primeros cajones llenos de conos y como falta señalamientos y el pésimo diseño del mismo, nunca imaginé que tenía más niveles interiores. Después de estar batallando aparece una