Excelente acogida en la recepción y muy buenos consejos de rutas de senderismo como de restaurantes de la zona. El lugar es precioso las habitaciones en realidad son hermosos chalets de montaña casi individuales y lo que que se disfruta mas es la tranquilidad y la vista panorámica tomado el desayuno en la terraza privada del apartamento mirando al valle, ademas los chalets son muy separados del uno al otro vamos que no son adosados! Con lo cual con muy buena privacidad. Tuvimos un apartamento 4 personas, super bien equipado, con su cocina, muy limpio todo y como nuevo como sin estrenar, muy acogedor en su interior de madera, al llegar encendimos la caldera ajustando el termostato para quitar la humedad interior pero pronto con los nórdicos de las camas tuvimos que apagar todo... Volveré sin duda igual en Primavera Verano o Otoño pero en Invierno debes ser mágico el entorno lugar ideal para despejarse la mente...