reserve una habitación y cuando llegamos el personal amablemente nos condujo a ella y nos ofrecieron una bebida de cortesía, ahí empezó todo, la habitación tenia cucarachas cerca del baño y el tarro donde venia la bebida estaba sucio de labial, nos ofrecieron un upgrade y cuando llegamos a la nueva habitación muy bonita por cierto, de nuevo varias cucarachas en la regadera y el lavabo del baño, finalmente nos cambiaron de nuevo de habitación ya sin problema de cucarachas, pero al día siguiente muy temprano empezaron a preparar unas desayuno justo debajo de esta habitación haciendo demasiado ruido, horrible experiencia y detalles que un hotel boutique no se debería permitir