Aunque las personas fueron muy amables no tienen una buena organización. El primer día al llegar las primeras dos personas se dieron cuenta que sólo había un juego de sábanas y 3 almohadas, faltando otro juego de sábanas y otra almohada, ya que al final íbamos a ser cuatro, pues bien aún pidiéndolo al llegar, las sábanas y la almohada no nos las trajeron hasta pasadas las 12 de la noche del día siguiente, aún reclamandolas insistentemente.
Por otra parte el apartamento estaba situado por debajo del nivel de la calle y prácticamente encima de la terraza estaban ubicados seis aparatos de aire acondicionado de los pisos superiores, produciendo aire caliente y ruido.