Me he quedado en este hotel 4 veces, 3 en la Suite Las Hamacas y esta es la 1a vez que me quedo en la Suite Del Mar (28) y tuve una mala experiencia desde mi llegada: edredón y sábanas sucias, no dejaron cápsulas para café, no salía agua caliente ni había presión de agua en la regadera. Fueron lo “arreglaron” y a los 2 días pasó de nuevo, bañándome con agua fría y un chorrillo de agua. Luego una noche no había agua ni para bajarle al baño. Q la empresa no había llenado la cisterna. Lo resolvieron a la 1 am
Un día pedí un taxi y quedaron de avisarme, pasaron 30 min y nada, obviamente me fui, y “Alexis” me dijo después q lo tenía q pagar, q estaba atendiendo otros clientes y por eso no me avisó, me dijo q eran 200 cuando siempre pagaba 150 y cuando le digo q porqué si siempre pago 150 me dice: “bueno pague $150” (lo tengo x escrito en WhatsApp). No lo pagué porque no fue mi error…
El restaurante: la comida es buena, servicio lento, café frío (aún pidiendo el capuchino q no está incluido en el desayuno). Hubo más detalles,.. pero se alargaría muchísimo más…
LO BUENO:: una chica nueva llamada “LENNY” con una excelente disposición para ayudar y muy buena actitud, apoyándonos y al pendiente. Ella resolvió lo de la falta de agua buscando al vigilante aún y cuando no le correspondía.
Sentimientos encontrados, no sé si regresaría al hotel, quizás solo por la buena ubicación y playa q tiene, por LENNY y siempre y cuando sea otra Suite.