Está ubicado en una zona tranquila, es necesario coche en mi opinión y se aparcaba delante sin problema.
la habitación es sencilla, pero tiene lo justo y necesario, aire acondicionado que iba bien. Lo malo es la poca presión y la ducha de contrastes que había por ello, supongo que por la falta de agua en general en la isla.
La señora de la limpieza no es que limpiara mucho, las camas las hacía como mi hijo pequeño e intento entrar todos los días bien temprano en la habitación incluso el día que nos íbamos antes de irnos. Deberían de formarla más.
En la recepción bien, secos, pero correctos, dejamos las maletas el último día diciendo la hora a la que pasaríamos a por ellas, llegamos y estaba cerrado, pero llamamos al móvil que indicaba en la puerta y en menos de 10 minutos estaba.
Parece que había cosas malas, pero aun así nos sigue pareciendo una buena opción debido a su precio ajustado.