Experiencia buena. En detalle, llegamos a una de las habitaciones pequeñas. Faltaba mucha mantención, había olor a humedad y la ducha no tenia presión de agua. Por este último motivo, nos cambiaron a una de las habitaciones grandes y es evidente la diferencia. Resueltos los aspectos anteriores, sin embargo, faltaba mas detalle en el aseo, faltaba una cafetera en las habitaciones y la mitad de la estadía no tenían disponible menta, por lo que la mitad de los tragos no se podían pedir.
Wifi en ambas habitaciones fue deficiente.