Nos gusto bastante el Lugar, muy céntricos , cercano al Vaticano, demoras 18 minutos caminando y estas a cuadras del metro Lepanto. El lugar esta rodeado de restaurantes y gelaterias excelenge y a buen precio. La habitación amplia y comoda, tenia un frigobar que tenia leche, mantequilla, agua, yogurt y jugos para el desayuno, también una mesita donde habia una maquina de café, dulces, cereales. Reponian a Diario los alimentos y líquidos. Danielle quien noa recibió, fue muy amable.