El hotel sufrió daños por el Huracán Laura, se notaba en la piscina y el mal olor, uno de los cuartos olía a humedad y por consecuencia la cama no era cómoda, los pasillos estaban sucios y mal olientes con colillas de cigarros tiradas, rente dos cuartos y los dos eran diferentes, el check in tardo mucho y la chica no era muy amable, gente tomando justo en la entrada hasta altas horas de la noche, la verdad no es un buen hotel, no pienso volver a hospedarme ahí